“Una de las tareas primordiales de la Pedagogía crítica, radical y libertadora es la de trabajar la legitimidad del sueño ético y político de la superación de la realidad injusta. Es la de trabajar la genuinidad de esta lucha y la posibilidad de cambio, es decir, es luchar contra la fuerza de la ideología fatalista dominante que estimula la inmovilidad de los oprimidos y su adaptación a la realidad injusta, necesaria a los dominadores. Es defender una práctica docente donde la enseñanza rigorosa de los contenidos NUNCA se haga de manera fría mecánica y MENTIROSAMENTE NEUTRA.”
Paulo Freire- in Pedagogia de la Indignación.
Pandina de nacimiento y de corazón, la Profesora Sofía Calpiñeiro Añez, singular Maestra del área Rural en la Amazonía boliviana, luchó incesantemente por JUSTICIA, LIBERTAD y por los DERECHOS HUMANOS, condiciones imprescindibles para el progreso de los pueblos, de manera solidaria ejerciendo y practicando la equidad.
Sofía Calpiñeiro Añez luchó contra todas las formas de opresión, contra todas las formas de violencia y de discriminación y esa lucha poco a poco le fue carcomiendo los huesos y la carne, empero, JAMÁS le mermaron LA CONSCIENCIA, ni sus CONVICCIONES, tampoco su COHERENCIA.
Con el pasar de los años la magnitud de sus actos aparecen con nitidez y de alguna forma podemos considerarla como rareza insólita, con matices de selva y sencillez del agua, lo afirmo sin temor de ser demagógica, por consiguiente el objetivo de esta biografía no se detiene en la narrativa simplista de la vida, sino de analizar y de explicar con humildad la vida, en su contexto geográfico, político-histórico y social.
Considerando esos preámbulos, nos indagamos: En la región selvática del Norte boliviano, existieron mujeres y hombres que en las últimas ocho décadas, si prefieren, último siglo, dedicaron sus vidas por los ideales revolucionarios socialistas?
Cual fue la fuerza motriz que alimentó esa lucha, en una región aislada geográficamente, donde la pobreza alimentó y alimenta los ciclos de opresión?
Cómo justificar la denominación de “REVOLUCIONARIA AMAZÓNICA” dada a Sofía Calpiñeiro Añez?
Para los nacidos en Pando que conocieron/conocen lo que fue y lo que es la realidad integral de la región, les permitirá recordar.Para las nuevas generaciones pandinas, para los recién llegados que no conocieron/conocen esta realidad les permitirá enterarse de lo que ha sido, de lo que es la Amazonía con su legado histórico.
Para los que se omitieron/omiten de estos conocimientos, tendrán la oportunidad de mirar para el pasado para tener perspectivas de sedimentar el futuro, pues, sería ingenuo suponer que las bases del futuro se sustentan en el vacío, así como suponer que hasta el presente existió un vacío de luchas en Pando.
En el Norte de Bolivia, contrariamente a lo que se quiera hacer pensar, existe una historia sólida y densa de luchas donde mujeres y hombres contribuyeron para poner fin a los regímenes “de facto”, anhelando diuturnamente el régimen democrático para promover los cambios y transformaciones del país.
En aquel entonces los que levantaban la BANDERA DE LA DEMOCRACIA no eran tan numerosos, el sistema represor lo consideraba acto imperdonable de sublevación, “castigando” así, de diferentes formas a l@s revolucionari@s en Cobija y en Pando.
Después de algún tiempo de vigencia del régimen democrático, se torna fácil levantar algunas banderas, la amnesia premeditada hace que nos olvidemos que el suelo del país se encuentre irrigado hasta la napa freática de sangre de mártires que sucumbieron bajo las garras del sistema represivo, mártires anónim@s, entre ellos inúmeras MUJERES.
Lo de la Profesora Sofía Calpiñeiro es realmente inaudito, por el hecho de ser MUJER, por la época en que vivió, por las características de la región, por su coraje, integridad y lucha, todo eso trasparecen en el relato de sus actos, a través de sus escritos y a través de la memoria de l@S que la recuerdan.
Fue así que Sofía Calpiñeiro denunciaba a los “señores” de las barracas( tierras de la amazonia) por el trabajo y trato deshumano al que eran sometidas mujeres y hombres, verdadader@s esclavos del “barraquero”, ella afirmaba que las MUJERES eran triplamente victimadas: por el marido, por el patrón y por el Estado que era omiso e/o ausente en la selva pandina.
En los Anales del Sindicalismo en Pando su nombre consta como baluarte de la Federación de Maestros Rurales de Pando y en los archivos de la Confederación de Maestros Rurales de Bolivia (CONMERB) su nombre fue reconocido como digna representante de la mujer y profesora pandina.
(CONTINUARÁ)
Escrito por: Norma Negrete Calpiñeiro - Enero - 2010
